Una secreción nasal, picazón en los ojos y en garganta pueden surgir cuando los días se hacen más cortos y las hojas comienzan a cambiar.
Esto puede ser especialmente difícil para las personas que son sensibles al moho y al polen estacional.
Otros problemas relacionados con los cambios de estación en el Otoño son:
1.- Fiebre del heno, es un término que en realidad no tiene nada que ver con el heno. En cambio, es un término usado para describir los síntomas de las alergias del verano tardío. La Ambrosía es una causa común, está planta suele comenzar a polinizar a mediados de agosto y puede seguir siendo un problema hasta que una helada se presente, dependiendo de donde usted viva.
2.- Clima muy cálido y seco, aunque la mayoría de la gente disfruta del verano, las temperaturas inusualmente cálidas pueden hacer que los síntomas de rinitis duren más. Las esporas del moho también pueden ser liberadas cuando la humedad es alta, o el clima es seco y ventoso.
3.- Hojas. Algunas personas pueden tener dificultades al recoger a diario las hojas durante el otoño. Pero para las personas alérgicas, el barrerlas es un suplicio o simplemente imposible de hacer. Al hacer esta labor se puede mezclar polen y el moho, causando alergias y asma. Las personas con alergias manifiestan los síntomas no sólo con la hojas secas sino también al cortar el césped y realizar labores de jardinería.